SOPHIE MASSIEAU
Francia
Sophie practica yoga desde hace doce años. Recibe sus primeras clases de yoga con Mika de Brito (Ashtanga) en Paris durante tres años. Prueba la Kundalini, se inicia al Vinyasa, Hatha y a la meditación budista tibetana a lo largo de sus viajes en Francia, India y América Latina.
Para profundizar la comprensión física y anatómica de las posturas, se pone a estudiar el Yoga Iyengar. Este enfoque alimenta su búsqueda en la práctica del tango argentino que baila desde hace 8 años. En 2018, obtiene un diploma de la escuela internacional de Yoga Ashtanga Surya-World (https://www.surya-world.org/fr/) y crea Surya-Alpes donde enseña y organiza talleres. Asesora en fitoterapia y técnica de laboratorio, propone también talleres Phyto-Yoga y elabora productos naturales y éticos a base de plantas para bailarines.
A través de la disciplina yóguica, el trabajo corporal (equilibrio, resistencia, construcción y relajación de músculos y articulaciones), energético (control de la respiración y de las sensaciones) y mental (agudeza de la percepción y de la concentración) ayudan a dejar ir, tanto en el baile como en la vida en general.
Según Sophie, la energía generada por el yoga no es distinta de la energía creada cuando uno baila. Desarrollar confianza, empatía y el don de sí mismo, es una ciencia sensual orquestada, que el yoga permite perfeccionar a través de los hermosos instrumentos que son el cuerpo y la conciencia.